Apostando por un sistema de gobernanza permanente en materia de ciencia, el proyecto Nodo Ciencia Austral convocó una nueva sesión del Comité de Coordinación Macrozonal, integrado por representantes de universidades, centros de investigación, gobiernos regionales y ONG de las regiones australes: Aysén,Magallanes y la Antártida chilena.
El trabajo colaborativo entre actores que integran el ecosistema científico-tecnológico será el sello para el segundo año del proyecto Nodo Ciencia Austral, iniciativa ejecutada por la Universidad de Magallanes, la Universidad de Aysén, el Instituto Antártico Chileno (INACH) y el Centro de Investigación en Ecosistemas de la Patagonia (CIEP), con financiamiento de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo (ANID).
En una nueva sesión del Comité de Coordinación Macrozonal, se presentaron los avances de la Hoja de Ruta que continúa en proceso de construcción, en miras a contar con una planificación macrozonal en materia de ciencia, tecnología, conocimiento e innovación hacia el año 2030. Así también, el Director del proyecto, Dr. Juan Carlos Aravena, destacó que el Nodo contará con un nuevo financiamiento de ANID para trabajar en torno a tres ejes de acción con el firme propósito de robustecer el ecosistema de CTCI de las regiones de Aysén, Magallanes y la Antártica Chilena. El primer eje es el diseño de un sistema de gobernanza que contrarreste el problema de fragmentación y fomente la articulación de los actores en la Macrozona. El segundo apunta a desarrollar el concepto de ciencia abierta para democratizar el acceso a la información científica, con actividades que buscan construir capital social e incrementar el impacto territorial. El tercer foco de trabajo consiste en fortalecer las capacidades de gestión de iniciativas científicas, a través de la elaboración de una cartera de proyectos priorizados según los resultados de la Hoja de Ruta.